Diario: ¿Por qué fue un error comprarme un monitor de fertilidad?

Empecemos desde el inicio, ¿por qué me lo compré en primer lugar?

Una de mis amigas lo tenía y hablaba maravillas de él… tanto que honestamente me sonaba a brujería.
¿Un aparato que de alguna manera se comunica con el cuerpo y funciona como oráculo y te dice si sos o no fértil un día? Hum, no lo sé Rick… me sonaba misteriosamente parecido a un magic eight ball.

magic eight ball

No puedo mentir y decir que no me llamó la atención, lo hizo. No entendía su funcionamiento y la lógica detrás de él, pero mi amiga tenía ya varios años usándolo y no tenía ninguna “bendi”.

Otra cosa que me hacía decir: “Hum, bueno, tal vez sí funciona” era el precio. Ahora cuando lo pienso, me enoja que un factor como este haya influido en mi decisión… “me fui de polla” con una de las estrategias de mercadeo más antiguas de la historia: “si es caro, es bueno”.

Otra vez, ¿entonces por qué lo compré?

Leer Taking Charge of your Fertility me dejó, seguro como a muchxs de ustedes, abrumada y creyendo: “tiene que haber una manera más fácil de hacer esto, ojalá de manera automática” y claro, en mi mente saltó el aparatito aquel de mi amiga que me recordaba más a una ouija que a un método anticonceptivo real, pero estaba dispuesta a intentarlo.

Hablé con mi novio, una vez más creímos que estábamos tomando una decisión informada, responsable e inteligente. En este camino de los anticonceptivos hay muchas trampas y ya que yo me he ido en varias, quiero contarles para evitarles un mal rato. El primer engaño fue pensar en modo capitalista: “si actualmente gastamos más de ¢10.000 al mes en pastillas, es mucho más inteligente hacer esta inversión una vez y para siempre”. El sistema que conocíamos, nos había hecho creer que la seguridad se compra y que no era nada barata.

Lady Comp (que es el monitor de fertilidad que yo compré), promete 7 años de buen funcionamiento… pero hablemos un poco sobre esto.

Funciona así: todos los días, suena la alarma a la misma hora, unx se pone el termómetro en la boca, al ratito suena un beep y el tamagotchi da su veredicto: día fértil o no fértil.

Segunda trampa: su gran parecido a practicar Fertility Awareness Method, nos hizo pensar que estábamos practicando Fertility Awarness Method.

Me parece que la categoría de FemTech sí entra dentro de la sombrilla de FABM (Fertility Awareness Based Methods), porque es de temperatura basal, sin embargo, no requiere mayor conocimiento de parte de la usuaria (ni tampoco le da muchos datos para la autogestión de su salud). En el método sintotérmico de reconocimiento de la fertilidad, la temperatura basal es un signo esencial para confirmar ovulación, sin embargo, no nos funciona por sí solo para confirmar fertilidad. Necesitamos del signo más importante y el que nos indica cuándo abre la ventana fértil: el moco cervical.

Usar un monitor de fertilidad nos hace, una vez más, dependientes de algo externo para controlar la natalidad, ¿y si se pierde? ¿y si se daña? ¿y luego de los 7 años de usarlo y aún no sé nada sobre cómo funciona realmente mi cuerpo? ¿y si estoy en el apocalipsis zombie y se me acaban las baterías del lady comp? Ya todxs vimos The Walking Dead y aunque, para efectos de trama, tener un bebé en aquel montón de peripecia fue muy emocionante, en la vida real las cosas no funcionan (o no tienen que funcionar) así.

Mi experiencia

Ok, entonces reunimos la plata, lo pedimos por Amazon y nos llegó por Jetbox. Estábamos muy emocionados (especialmente yo) por despedirme de las pastillas para siempre y por tener una solución libre de efectos secundarios (a menos de que el crédito se considere uno… al rato y deberíamos).

Igualmente, le dije a mi novio que no quería que dejáramos de monitorear moco cervical y otros signos de fertilidad porque si tuviera que elegir una manera de describirme, control freak es una que se acerca mucho. Descargamos Kindara para llevar el registro (este sí es un app -el único- que recomiendo hasta el mismo día de hoy) y utilicé las reglas aprendidas en el libro de Taking Charge para ir confirmando ovulación y ventana fértil. Así llegué a las primeras contradicciones:

Mientras la teoría me decía que se puede confirmar ovulación luego del cruce entre una evolución de moco cervical de menos a más estrogénico + 3 días junto a al menos 3 temperaturas ascendentes de 0.2 grados entre ellas (esto es siguiendo las reglas de Taking Charge), Lady Comp me marcaba el día de Ovulación en un momento diferente a mis cálculos.

Tercera cáscara de banano: Por supuesto que mi primera reacción fue pensar que quien tenía la razón era la tecnología y no yo, porque claro… error de usuaria, pero… ¿si Lady Comp no estaba haciendo sus cálculos con las reglas de FAM, entonces cómo sí lo estaba haciendo?

Comprenderán que monté todo un CSI para dar a fondo con la manera en la que mi gallinita de oro estaba operando. Busqué los estudios que probaban su eficacia (que por cierto, a principios de 2019 retractaron) y descubrí que funciona con un algoritmo.

¿Es igual a usar el método del ritmo?

No.
Pero la lógica que usa no es que sea mucho mejor que esa.
Lady Comp, Natural Cycles y Daysy funcionan con bases de datos de más de 30.000 mujeres. Su algoritmo toma como base los ciclos de otro montón de mujeres para encontrarle sentido al mío.
Incluso, muchas veces noté que al inicio me marcaba un día de ovulación y luego me marcaba otro.
Verán, esto no nos pasa cuando entendemos realmente cómo funciona el ciclo y el Método Sintotérmico de Reconocimiento de la Fertilidad, gracias al cual podemos tener la certeza siempre.

Además, estos aparatos hacen sus predicciones de ovulación y menstruación y aunque para la segunda unx sí tiene que ingresar el dato para luego, en futuros ciclos, mejorar dichas predicciones, no toma en cuenta el otro montón de factores externos e internos que afectan directamente a un evento tan fortuito como la ovulación. A mi parecer, hace promesas que no puedo mantener.

¿Por qué no lo recomiendo?

Primero, porque creo firmemente en que cada cuerpo menstruante es capaz de aprender a escucharse y a registrar sus ciclos sin ayuda de ninguna tecnología cara.

Para practicar Método Sintotérmico lo único que necesitamos es un termómetro de dos decimales y en Amazon se nos ofrecen muchas opciones que varían en precio y facilidades. Cada unx está en su libertad de elegir eso según sus posibilidades y deseos.

Una pregunta que me hacen mucho es: ¿cuál termómetro me recomendás? y mi respuesta siempre es que el termómetro no lo es todo… de hecho no es nada sin nuestro entendimiento real del ciclo y del método que hayamos elegido seguir.

Es preferible empezar de menos a más. Elegir un termómetro sencillo y para nada costoso y después, si se considera necesario, cambiar hacia uno más avanzada.

En mi caso, yo quise irme por lo más high-tech y ahora lo que tengo es un termómetro ridículamente e innecesariamente caro.

Otra de mis recomendaciones es que, antes de hacer una inversión así de grande en tecnología (que, al igual que un teléfono o una computadora, eventualmente va a necesitar un cambio) es hacerla en conocimiento: comprar libros, contratar a una educadora. Cada colón que se use en educación se transformará, ahí sí, en años de auto-conocimiento y auto-gestión.

Viene la respuesta a otra pregunta frecuente: ¿dónde encuentro una educadora de Método Sintotérmico? Bueno, en este momento me estoy certificando y pronto me gustaría darles la compañía y apoyo que yo misma necesité en este proceso de dejar los anticonceptivos hormonales y que no tuve en mi región, ni en mi idioma.

Una de las barreras más altas de practicar Fertility Awareness es que la mayoría de los recursos están en inglés y no son accesibles para todxs.

Afortunadamente, eso está cambiando. Actualmente hay otras educadoras en América Latina que pueden fácilmente encontrar en instagram si buscan bajo los hashtags de #MetodoSintotermico y #FertilityAwareness .

Elegir una educadora es un tema tan personal, que no me atrevo a recomendar unos servicios sobre otros… ni siquiera el que yo planeo ofrecer en un futuro próximo. Solo unx misma sabe qué características de una instructora le resuenan sobre otras. Ya fueron muchos años de imposiciones y de recibir instrucciones del tipo: “necesitás esto, necesitás esto otro”. Defiendo mucho el derecho a decidir y en esta ocasión, lo vuelvo a hacer.

Lo que me interesa que se lleven de este post es la convicción de que no necesitamos más que nuestra capacidad y conocimiento para gestionar nuestra propia fertilidad.

Desconfíen de todos los métodos que ofrecen soluciones instantáneas a cambio de precios elevados. En el fondo el interés que persiguen no es el de mejorar la vida de las mujeres y personas no binarias con ciclo menstrual. Su único objetivo es hacer dinero y parten de la inseguridad y desconfianza que sistemáticamente nos han sido infundadas para conseguirlo. Así que “FemTech” no es tan Fem después de todo.

¿Y del todo los monitores no tienen un mercado?

Por supuesto que sí.
Los defenderé por encima de cualquier método anticonceptivo hormonal cualquier día de la semana, del mes y del año.

Los monitores no tienen absolutamente ningún efecto secundario médico (culturalmente, me parece que nos alejan de creer que somos las dueñas máximas de nuestros cuerpos, pero esa es mi opinión, no algo que pueda probar con datos puros y duros como los que sé que buscan cuando hablamos de este tema).

Puedo ver cómo un aparato de estos facilita la vida de muchas mujeres y personas no binarias con ciclos menstruales que deciden, conscientemente, que un método de reconocimiento de fertilidad se sale de sus deseos o posibilidades. Seré la última en interponerme entre una persona con útero y sus decisiones. Me alegra que exista una opción para todxs aquellxs que no quieren intoxicar su cuerpo con drogas anticonceptivas, pero que saben desde su particularidad que no pueden comprometerse con Fertility Awareness en este momento de sus vidas.

Como les he dicho antes (y lo haré mientras me quede voz o blog) mi batalla no es convencerlxs de usar el método que yo uso. Método Sintotérmico ha sido perfecto para mí y sé que para muchxs otrxs también sería, pero no creo y no pretendo que sea la elección de absolutamente todxs.

El interés máximo de Nación Ovulación es llevar información para que ustedes, con todos los datos, la tomen desde su libertad y conocimiento. Nadie se conoce mejor que unx mismx, nadie sabe mejor que unx cuáles son sus posibilidades.

Todo esto dicho, me despido por ahora. Ya saben que siempre disfruto sus comentarios, ¡déjenlos abajo o escríbanme a nacionovulacion@gmail.com !

Nos leemos pronto,
Ale.